La preparación de té ha sido, desde tiempos ancestrales, un recurso valioso para aliviar molestias y acompañar procesos de sanación. Las propiedades de las plantas han sido reconocidas por generaciones, utilizándolas para tratar síntomas específicos del cuerpo. Sin embargo, es importante destacar que las infusiones no sustituyen el diagnóstico ni el tratamiento médico; siempre es recomendable consultar a un especialista.
Los tés, además de ser una herramienta natural, pueden ayudar a calmar ciertas dolencias y promover el bienestar. Sin embargo, es crucial asegurarse de que las hierbas utilizadas no sean perjudiciales para nuestra salud, considerando posibles alergias o reacciones adversas. Cada organismo es único, y lo que es beneficioso para unos puede no serlo para otros.
Las infusiones se preparan combinando agua caliente con hierbas frescas o secas. Si se utilizan hierbas frescas, se recomienda una cucharada sopera por taza de agua hirviendo, y es preferible no almacenar las mezclas frescas para conservar su frescura y eficacia.
Ejemplos de infusiones y sus beneficios
Té de salvia
La infusión de salvia es ideal para aliviar resfriados y dolores de garganta, especialmente cuando se utiliza para hacer gárgaras.
Preparación:
Hervir ½ taza de agua.
Añadir 1 cucharada sopera de salvia seca (5-6 hojas).
Dejar reposar durante 7 minutos, colar y almacenar en una botella esterilizada si se desea refrigerar.
Uso: Tomar una cucharada de la infusión, realizar gárgaras durante un minuto y escupir.
En el ámbito energético, la salvia está asociada con la sabiduría, la protección y la purificación.
Té digestivo
Ideal para aliviar molestias estomacales como ardor o gases.
Ingredientes:
1 parte de menta.
1 parte de albahaca.
1 parte de semillas de eneldo.
Preparación:
Mezclar las hierbas secas en un tarro pequeño.
Verter 1 taza de agua hirviendo sobre 1 cucharadita de la mezcla.
Dejar reposar de 7 a 10 minutos, colar y beber.
Este té está asociado con la prosperidad y el equilibrio digestivo.
Té para resfriados
Una mezcla reconfortante para fortalecer el cuerpo y aliviar síntomas asociados a resfriados.
Ingredientes:
1 parte de jengibre.
1 parte de flores de saúco.
1 parte de milenrama.
Preparación:
Combinar las hierbas secas en un frasco.
Usar 1 cucharadita de la mezcla por taza de agua hirviendo.
Dejar reposar de 5 a 7 minutos, colar y beber.
Té relajante para dormir
Perfecto para calmar la mente y favorecer el sueño.
Ingredientes:
1 parte de lavanda.
1 parte de menta gatuna.
1 parte de verbena.
1 parte de manzanilla.
Preparación:
Mezclar las hierbas en un tarro.
Añadir 1 cucharadita de la mezcla a 1 taza de agua hirviendo.
Dejar reposar de 5 a 7 minutos, colar y beber antes de dormir.
Nota final: Estas recetas son parte de una tradición milenaria basada en el conocimiento de la naturaleza. No reemplazan tratamientos médicos, pero pueden ser una maravillosa herramienta complementaria.
Recuerda siempre investigar si las hierbas son adecuadas para ti y consultar a un profesional de la salud en caso de dudas.
